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Lo
siguiente que recuerdo es despertar en una cama de hospital con
vendas en la cabeza y algunas vías en los brazos. A los pies de la
cama estaban mis tres pokémon durmiendo. Estaban aparentemente bien,
incluso Merry había recuperado todas sus hojas y tenía un aspecto
saludable. Desde el sofá de la habitación me saludó alguien.
-Buenos
días Lechu, ¿qué tal te encuentras?- Preguntó la femenina voz de
Delta con preocupación.
-¿Y
tú quién eres?- Bromeé yo. -Estoy bien, pero no sé qué ha
pasado.
-Esta
mañana te estaba esperando a la entrada del bosque.- Respondió
Delta. -Pero como no venías fui a ver si estabas entrenando aún en
la montaña. Al subir el primer tramo de escaleras te vi tirado en el
suelo frente a un derrumbamiento de cueva con Godzilla acurrucada
sobre tu pecho.- Relató Delta. -Entonces con ayuda de mis pokémon
te traje de vuelta a este pueblecito donde te han atendido. También
me tomé la libertad de llevar a tus pokémon a curar al centro.
Me
incorporé un poco en la cama y noté un fuerte dolor de cabeza. Así
que aparentemente Godzilla me había salvado tras el derrumbe en la
cueva y luego Delta me había encontrado y me había traido al
hospital. Me alegré inconscientemente, mis compañeros no iban a
dejar que muriese tan fácilmente.
-¿Y
Enzo?- Pregunté curioso.
-No
lo sé.- Respondió Delta. -Me imagino que seguirá esperándonos en
el gimnasio Ilusión.- Se limitó a decir mientras se acercaba a la
cama y pulsaba un botón del mando para que una enfermera viniese.
-Entonces
será mejor que nos pongamos en marcha y no le hagamos esperar más,
no quiero que se preocupe.- Fanfarroneé mientras sacaba los pies
descalzos por el lateral de la cama, arrastrando un poco el cuerpo
para bajarme y ponerme en pie, con tan mala suerte que la bata médica
comenzó a deslizarse hacia arriba. -Será mejor que no mires.-
Aconsejé a Delta mientras me colocaba el batín. -Creo que no llevo
ropa interior.- Dije avergonzado mientras ella reía.
-¿Y
quién crees que ayudó a desnudarte y meterte en la cama?- Dijo con
una sonrisa inocente en la cara tomándome el pelo.
Cuando
la enfermera vino me revisó todas las heridas y contusiones y al
final dijo que podía darme el alta, pero iba a tener que tomar
ibuprofeno de 1 gramo para el dolor de cabeza durante unos días.
Pedí a Delta y la enfermera que salieran de la habitación mientras
me daba una ducha rápida para quitarme la suciedad y me vestía. Mis
pokémon se metieron conmigo bajo el agua para refrescarse.
Una
vez bien limpio, salí de la habitación y luego del hospital junto a
Delta y nos dirigimos al bosque de nuevo. Tras caminar un poco con
leve dificultad, pues tenía la pierna amoratada, llegamos a la
entrada del bosque, inspiramos y entramos. Caminamos siguiendo un
camino de tierra que zigzagueaba cuando se encontraba con algún
árbol y fuimos viendo numerosos pokémon. Encontramos algunos
cascarones de Metapod y Kakuna vacíos, en señal de una reciente
evolución. Si había Beedrill cerca teníamos que andar con cuidado.
Anduvimos
un buen rato hasta topar con un pequeño lago en el interior del
bosque. Nos acercamos para rellenar la cantimplora y de pronto un
pokémon nos atacó.
El
Surskit saltó hacia nosotros mientras llenábamos la cantimplora y
lanzó unas burbujas que interceptó Godzilla tras salir de su
pokéball al sentir el peligro. No estaba seguro de si me gustaba que
mis pokémon salieran siempre sin que les avisara, pero ahora tenía
asuntos más importantes de los que preocuparme.
Surskit
se lanzó a toda velocidad y golpeó a Godzilla en la cabeza,
haciendo que cayera de espaldas, pero Treecko aprovechó la inercia
del golpe para hacer un backflip en el aire que le permitió golpear
con la cola a su oponente en un conveniente ataque Destructor.
Surskit
sufrió leves daños y se recuperó muy rápido, se dio la vuelta y
volvio a usar Ataque Rápido contra Godzilla, golpeando esta vez en
el abdomen y cuando estaban en contacto usando Burbuja a bocajarro
contra su oponente. A pesar de no ser muy eficaz, Godzilla sufrió
daños severos por culpa de la combinación de ataques.
-¡Vale
Godzilla, usa Malicioso!- Godzilla se puso a cuatro patas, abrió la
boca por completo y comenzó a gorjear. Treccko emitía un sonido
indesccriptible e intimidante. Parecía que al subir de nivel,
Godzilla había aprendido nuevos trucos para sus ataques y ahora su
forma de bajar la defensa rival era más efectiva.
Surskit
se amedrentó un poco, dudando en si continuar atacando, pero al
final se decidió a volver a lanzarse al Ataque Rápido. La velocidad
del ataque hizo que Godzilla no pudiera esquivarlo, pero volvió a
apañárselas para, tras recibir el ataque de lleno en el estómago,
apartar un poco a Surskit y girar sobre sí mismo aprovechando la
fuerza del golpe de su rival para propinarle un golpe crítico con la
cola que le derribó contra un árbol y le dejó debilitado.
No
sabía porqué nos había atacado ese Surskit, pero me había dado
problemas. Terminamos de salir del bosque tomando un Batido de
Kimberlie para que Godzilla recuperase su salud.
Tras
terminar el batido, llegamos al borde del bosque, el punto en el que
acababa, y justo delantes de nuestras narices se erigía un gran
edificio con aspecto de antiguo templo griego con columnas de mármol
y un panteón decorado.
-¡Por
fin llegáis tortolitos!- Nos saludó Enzo efusivamente. -Habéis
tardado tanto que me ha dado tiempo a ganar la Medalla Ilusión y el
teléfono de la líder.- Dijo nuestro compañero enseñándonos la
medalla con un número escrito.
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